La Comisión Europea ha propuesto dos nuevas regulaciones para endurecer el control de los gases fluorados de efecto invernadero (Gases F) y las substancias perjudiciales para la capa de ozono (ODS). La adoptación de estas regulaciones permitirá limitar el crecimiento de la temperatura global en línea con el Acuerdo de París. Esta propuesta contribuirá además a reducir las emisiones al 55% en 2030 y a alcanzar la neutralidad climática en Europa en 2050.
Los gases fluorados y ODS contribuyen extensamente al calentamiento global, siendo exponencialmente más perjudiciales que las emisiones de dióxido de carbono. Los ODS afectan a la capa de ozono encargada de proteger la Tierra contra la radiación ultravioleta. Ambas sustancias son comunmente usadas en la vida diaria: refrigeración, aires acondicionados, insulación, protección contra incendios, líneas enegérticas y aerosoles.
Estas regulaciones contemplan:
- Una mayor ambición: Los gases F solo podrán ser utilizados en aquellas aplicaciones donde no exista una alternativa viable. Se implementará como requisito la recuperación y destrucción de las sustancias ODS en el aislamiento de las estructuras que sean renovadas o demolidas.
- Implementación mejorada: La propuesta permite mejorar el control de las importaciones y exportaciones de gases F y ODS, reduciendo el comercio ilegal de estas sustancias. Además, se incrementan los requisitos para la certificación de ingenieros que puedan manipular estas sustancias.
- Monitoreo comprensivo: Se aumentará el número de sustancias y actividades monitorizadas por las autoridades.
Más información: https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/en/ip_22_2189