La ciudad de Valencia ha desarrollado una estrategia para involucrar a toda la comunidad en el logro de sus objetivos de transición energética, al tiempo que apoya a las personas en riesgo de pobreza energética a través de la creación de comunidades energéticas.
La ciudad está muy involucrada en su transición energética. De hecho, en 2021, Valencia aprobó la Misión Climática Valencia 2030 con el objetivo de convertirse en climáticamente neutra en 2050. La ambición de la ciudad es reducir sus emisiones de GEI en un 40% y aumentar su eficiencia energética y su participación en las energías renovables en un 27% para 2030.
Para conseguir todos estos objetivos, la ciudad quiere implicar a toda su comunidad en la transición energética.
En 2019, la Fundación Valencia clima y energía puso en marcha la primera oficina de energía de la ciudad, y a finales de 2022 se pondrán en marcha dos oficinas más. Su objetivo es servir como una ventanilla única, ofreciendo consejos a los ciudadanos interesados en aprender más sobre temas de energía. Realiza diferentes actividades para mejorar y difundir el conocimiento sobre las fuentes de energía entre los ciudadanos, proporciona información y ofrece formación y talleres sobre factura energética, eficiencia, renovación del hogar, derecho a la energía y generación de energía renovable a quienes estén interesados. Valencia ve la transición energética como una oportunidad para que los ciudadanos se impliquen en la definición y toma de decisiones de producción, gestión y consumo de energía.